¿Qué debes considerar cuando vas a aceptar una Oferta de Trabajo?

Cuando estés considerando una oferta de trabajo, lo primero que pensamos es ¿Cuánto me van a pagar? Claro que el salario es un factor muy importante, pero siempre he dicho, no determinante, sin embargo, puede que sea el factor decisivo para aceptar una oferta. Sin embargo, hay otros elementos del paquete de compensación que son tan importantes como el salario cuando estás a punto de tomar la decisión.

¡RECUERDA! El pago mensual cubrirá tus compromisos mensuales, pero considera otros beneficios, como esos elementos no tangibles que pueden hacer una oferta laboral muy atractiva.

Algunas veces, los beneficios pueden tener un peso importante cuando estamos evaluando la aceptación de una oferta de trabajo. Aquí se enumeran varios factores a considerar, incluyendo que debes evaluar o si tiene sentido o no rechazarla.

1) Evalúa muy bien la Oferta de Trabajo

Antes de decir, “Si, acepto” esta oferta, considera el paquete total de compensaciones, evalúa los beneficios, convenios, acciones, asistencias y asignaciones, ambiente de trabajo, flexibilidad de horarios, seguros, días de vacaciones, plan de retiro, programas de bienestar y ahorros, entre otros. También considera cuán cómodo te sientes con la descripción del puesto y si eso que vas a hacer te haría feliz en esta compañía.

Debes pesar los pros y los contras y tomarte tu tiempo para aceptar la oferta. No tienes que decir que “si” de una vez. Haz las preguntas necesarias a tu empleador y revisa bien cada beneficio. En caso de tener dos ofertas que considerar, haz una lista de comparación para que te ayude a tomar tu decisión.

2) Evalúa los Beneficios

Estos beneficios, incluyendo seguros médicos, planes de retiro, vacaciones, permisos por incapacidad, seguros de vida y sus coberturas y asignación de celulares o coches (para algunas posiciones), pueden representar hasta más del 30% de tu paquete de compensación total.

Es importante que te tomes tu tiempo para revisar que te están ofreciendo y asegurarte cuáles son tus necesidades y la de los tuyos en estos momentos, y no tomar sólo en cuenta el salario.

3) Obtén un buen Plan de Retiro

No todas las Empresas tienen Plan de Retiro, y aquellas que, si las tienen, pueden variar de una Empresa a otra. El 70% de las empresas multinacionales o líderes locales en México ofrecen a sus empleados planes de retiro complementarios a los obligatorios por Ley, colocando a los trabajadores en el país en mejores condiciones que los de España, India, Francia, China, Argentina, Venezuela, Chile y Colombia, de acuerdo con un estudio de la consultoría de recursos humanos, Mercer.

De las compañías que ofrecen esquemas de retiro complementarios en México, adicionales a la seguridad social, el 77% tiene planes de beneficio definido, donde el monto de la pensión se determina con base en el salario del empleado, los años de servicio y la edad de jubilación, detalló la consultoría. Otro 10% de las Empresas tienen contribución definida, donde el empleado y el patrón aportan una cantidad determinada, la cual deberá crecer a través de la inversión, tal y como funcionan las Administradoras de Fondos para el Retiro (AFORES), y 13% de las empresas ofrecen una mezcla de esquemas.

Evalúa muy bien en qué etapa de tu vida estás para ser participante de un buen Plan de Retiro porque esto puede ser tu futuro. Si ya cuentas hoy día con un Plan de retiro, considera que puedes transferir esos fondos de retiro a otra cuenta de Plan de Retiro, siempre y cuando así lo permita el plan. Revisa muy bien esas opciones, tu edad, tu tiempo de contribución al plan, intereses y portafolio de inversiones, entre otras.

Compara muy bien las contribuciones y evalúa cuánto puedes perder o ganar en este movimiento que estás por hacer. Recuerda tomar en cuenta tu edad, pues si retiras el dinero antes de tiempo, muy probablemente sólo podrás retirar los derechos adquiridos pagando impuestos sobre el saldo que puedas retirar. Esto dependerá de la administración de cada plan.

4) Considera si tienes acciones y “stocks” de la Empresa

Los planes de “stocks options” en las empresas, le dan el derecho al empleado de comprar un número de acciones a un determinado precio, dentro de un período preestablecido. Muchas veces, estas acciones pueden ser muy atractivas para los empleados, sobre todo en empresas muy grandes. Estas acciones se otorgan por lo general a ejecutivos y algunos empleados de determinado rango y su período de espera es de 3 años.

Las opciones sobre acciones tienen ya muchos años de historia en las bolsas de valores, pero su aplicación como incentivo para quienes prestan sus servicios a una empresa es bastante reciente; hacia los años sesenta, cuando los empresarios de Silicon Valley en California comenzaron a experimentar este instrumento, con tal éxito que pronto se extendieron por todos los Estados Unidos, para después desembarcar en el Viejo Continente y América Latina.

Conoce muy bien, los tiempos de “vestings”, número de acciones otorgadas, precios en el momento de otorgamiento, ejecución y venta, derecho a las acciones, fechas del ejercicio, tipo de acciones y todas las condiciones necesarias, con la finalidad de que no pierdas este derecho que tu empresa actual te pudo haber otorgado y siempre toma en cuenta el valor de esas acciones.

5) Solicita tiempo para decidir

Comúnmente sucede que a veces puedes tener hasta dos ofertas de trabajo en la mano, y no sabes qué hacer. Si no estás seguro, es importante no apurarse ni dejarse presionar.

Enfatiza tu entusiasmo, pero asegúrate de tener el tiempo adecuado.

6) Negocia tu salario

Luego de haber considerado todos los detalles de tu oferta de trabajo, analiza de nuevo el salario. ¿Realmente es suficiente? ¿Puedo ganar más? ¿Habrá algo que negociar?

Si no estás seguro, crea un presupuesto para saber exactamente si es suficiente o no este salario y si vale la pena el cambio. Algunos paquetes son negociables y otros no, pregunta si puedes tener una llamada o una junta con la finalidad de poder tener una mejor oferta.

7) ¿Cuándo rechazar una oferta?

Existen muchas razones para rechazar una oferta. Probablemente no sea el puesto correcto para ti, o los salarios y beneficios no son los que tu necesitas. No hay nada malo en rechazar una oferta y decir NO, obviamente declina, pero con elegancia.

Una vez que hayas tomado tu decisión si aceptar o no la oferta, debes hacer saber de inmediato al empleador. Tómate el tiempo para formalmente aceptar y renunciar a tu actual trabajo, nunca mientas acerca de ningún detalle y renuncia con gracia y agradecido, pues es importante dejar los puentes extendidos.

En mi experiencia, tuve una vez, una persona que lamentablemente nos había dicho que seguía trabajando en su compañía anterior, y ya había firmado la oferta y todo con nuestra empresa. Chequeamos en sus referencias y resultó que había mentido sobre su último empleo, pues ya tenía un par de meses que había salido de él. Cuando descubrimos eso, llamamos de inmediato al candidato para verificar una vez más y nos seguía diciendo la misma mentira, por lo cual, decidimos no proseguir con la oferta y cancelarla. Fue una experiencia muy desagradable porque el candidato tenía muy buen perfil.